Entradas

Mostrando entradas de noviembre, 2021

YO SOY EL QUE SOY

Mira, hoy no quiero seguir con más mentiras. Diré la verdad y nada más que la verdad.       No pienso seguir amoldándome ni a ti, ni a tus movidas. Ya Vale. Tú tienes una vida entregada en tus manos. Vívela. Y si no sabes pregúntale a quién si sabe. Quizás a día de hoy, no soy el más indicado, pero llegaré a serlo, simplemente porque lo busco y lo ejecuto de verdad. Hay momentos en los que nos invaden las dudas, se nos mezclan los deseos y las pasiones en nuestra mente, como un estado de falsa embriaguez que te lleva del éxtasis al vacío. Un sucio juego de hormonas que nos juegan malas pasadas, movidas por aquellos que saben cómo activarlas. Manipuladores. Aquellos que no saben llegar solos a sus propósitos, siempre tienen que arrastrar a alguien. ¿Serán felices estas personas? No lo creo. Porque la verdadera libertad va precedida de dejar ir libres, verdaderamente libres, a todos los demás. Siendo como son y aceptándolos como son. Es así y punto. ¿Por qué necesitas que los demás sigan

COSECHANDO PLAGAS

Lo que ocurre cuando nos enfrentamos a Dios, es que nos enfrentamos a la verdad, a la libertad, a la auténtica “ecología”, a nuestra propia prosperidad como seres, como personas, oprimimos nuestra salud, nuestra “economía” y perdemos la vida.   La vida no se trata de tener el control de todo, sino más bien, en ver la armonía de todo y de estar entre Dios y esa armonía viendo desde el palco la obra maestra de Dios junto con Él, ¿cómo explicarlo…? Fusionados con Él. Tampoco se trata de estar en armonía con la naturaleza, porque la naturaleza es salvaje, es la ley del más fuerte, no entiende de amor, aunque a veces parezca que sí cuando la comparas con este ser humano comportándose de una forma “tan brutalmente natural”.  Observar la naturaleza es como observar una puesta en escena que nunca termina. Se hace de noche, pero la noche está viva, te vas al medio del mar y el mar está vivo, los volcanes también están activos, cualquier pieza del universo está viva, el universo mismo también

TE DOY MI VIDA

    ¿Qué estaba pasando?   Era una tarde de marzo, el 20 de marzo del año 2014. Depresión tras depresión, buscando la realidad que tenía que vivir. Pero no cualquier realidad, quiero LA REALIDAD. Y la quiero pese a la muerte o a la vida, pese a la ignorancia y al caos, pese al sinsentido o al sentido más completo. ¿Qué es el hombre? ¿Qué hago aquí en una bola dando vueltas por un universo infinito? ¿porqué me preocupo? ó ¿Por qué me dejo de preocupar? ¿Por qué soy esclavo de mis deseos? Sobre todo, de mis deseos más vanales. ¿Qué pretendo demostrar? ¿A quién tengo que demostrarle nada buscado su admiración o simplemente su aceptación? ¿Por qué no tengo el valor suficiente para transcender la maldad? ¿Porqué con tal abundancia lucho por adquirir algo que es una miseria? ¿De qué sirve el orgullo? ¿Qué más da morir hoy que mañana? ¿Qué hago aquí? ¿Por qué no se ser yo mismo? ¿porqué no me perdono ni me acepto, ni a mí, ni a nadie?   Pues estaba pasando esto, una movida. Una